En ocasiones las personas descubren que las dificultades para entenderse con otros son porque se encuentran en orillas diferentes, separados, lejanos, como en mundos opuestos. A veces estas distancias aparecen entre los que más cerca están y los que más se necesitan, como entre padres e hijos.
Lo importantes es aprender que muchas veces lo que hacemos y decimos genera el desencuentro y que el desafío es construir puentes que nos unan.
Padres y madres participando de la actividad |
Los padres de los alumnos y el equipo del Taller Fátima realizaron, el miércoles 11 de mayo, una jornada de reflexión sobre la importancia de reconocer lo bueno, lo lindo, lo valioso en el otro. El objetivo fue compartir experiencias y aprender a no detenerse solo en el defecto y poder mirar las virtudes como punto de partida para una buena relación.
En la primera actividad se compartió el cuento Virtudes Choique de Carlos Joaquín Durán, que cuenta la historia de una maestra que enseña a los padres de sus alumnos a mirar con ojos nuevos a sus hijos para que puedan reconocer sus virtudes. “Debo construir el mundo con estos chicos. Pues entonces, ¿con qué levantaré la patria? ¿Con lo mejor o con lo peor?”, preguntó la maestra del cuento.
Luego, se presentó un breve video donde se muestró el impacto que tienen las palabras dolorosas que se le dicen a los chicos y también a los adultos. “Las palabras también dejan cicatrices”, remarcó el cierre del video y los padres se reunieron en grupos con los instructores de sus hijos para reflexionar juntos sobre estos temas.
El encuentro finalizó con un ejercicio muy sencillo y significativo que consistió en que los padres dejaran un mensaje positivo a sus hijos en unos cartelitos que representaban bocas. Un gesto amoroso, una palabra sentida para tender un puente. Ese puente es una mano extendida, una invitación a continuar por sobre los obstáculos.
Gracias a los padres de todos los alumnos que vinieron, fue muy valiosa su participación. A continuación compartimos algunas imágenes del encuentro.
Un espacio de reflexión en el Taller Fátima |
No hay comentarios:
Publicar un comentario